
Los chizpurfles son pequeños parásitos de medio centímetro de alto; se parecen a los cangrejos y poseen unos colmillos considerables. La magia los atrae, y pueden infestar el pelaje y plumaje de criaturas como los crups y los augureys. Los chizpurfles también pueden entrar en las viviendas de los magos y atacar objetos mágicos, como las varitas: las roen hasta la médula en busca de su fuente de poder mágico; o, sino, se instalan en calderos sucios y se dan un festín con la poción residual.
Se ha comprobado que, cuando no hay magia cerca, los chizpurfles atacan objetos eléctricos por dentro. Los estragos de los chizpurfles explican los intrigantes fallos de muchos artefactos eléctricos relativamente nuevos de los muggles.[1]
Repelentes
Aunque los chizpurfles son fáciles de destruir con cualquiera de la gama de pociones patentadas que hay en el mercado, las infestaciones graves pueden requerir una visita de la Subdivisión de Plagas del Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas, ya que estos parásitos, cuando están atiborrados de sustancias mágicas, resultan muy difíciles de combatir.[1]
Detrás de las escenas
- En el videojuego Harry Potter y la Piedra Filosofal (Versión PS1), se traduce el nombre del chizpurfle como parachupo.[2]
Apariciones
- Harry Potter y la piedra filosofal (videojuego) (Versión de PS1) (Solo mencionado/a)
- Harry Potter y la cámara secreta (videojuego) (Versión de PS1) (Solo mencionado/a)
- Harry Potter y el prisionero de Azkaban (videojuego)
- Animales fantásticos y dónde encontrarlos (Primera aparición)
- Pottermore (Solo mencionado/a)
- Wizarding World (Solo mencionado/a)
- Animales Fantásticos: Casos del Mundo Mágico
- Harry Potter: Hogwarts Mystery (Solo mencionado/a)
Notas y referencias
- ↑ 1,0 1,1 1,2 Animales fantásticos y dónde encontrarlos (real) - Bestias fantásticas de la A a la Z
- ↑ Harry Potter y la piedra filosofal (videojuego) (Versión PS1)