Periculum [puh-RIK-yoo-lum] es el conjuro de un encantamiento que permite lanzar chispas rojas desde la punta de la varita de quien lo usa. Las chispas se parecen a fuegos artificiales al ser arrojadas, y abarcan un amplio rango al ser disparadas a gran altura, para luego flotar sobre el lugar donde fueron lanzadas por el usuario. Similar a una bengala muggle, el hechizo puede usarse para indicar que alguien está en peligro, y que necesita ayuda inmediata.[1]
Este hechizo puede estar relacionado o ser una variante del encantamiento de chispas rojas.
Usos conocidos[]
- Albus Dumbledore indicó a los cuatro campeones del Torneo de los Tres Magos a lanzar chispas rojas al aire si necesitaban ser rescatados, antes del comienzo de la tercera prueba en 1995. Harry Potter usó este hechizo cuando descubrió que Fleur Delacour estaba siendo arrastrada por las paredes del laberinto.[1][2]
Etimología[]
Periculum es una palabra en latín que significa peligro.
Hechizos relacionados[]
Apariciones[]
- Harry Potter y el cáliz de fuego (película) (Primera aparición)
- LEGO Harry Potter: Años 1-4
Notas y referencias[]
- ↑ 1,0 1,1 Harry Potter y el cáliz de fuego (película) Cap. 23
- ↑ Lo anterior ocurre únicamente en la versión cinematográfica de Harry Potter y el cáliz de fuego. En el libro es Minerva McGonagall quien instruye a los campeones a usar chispas rojas si requerían ser rescatados. Además, Harry no usa el hechizo al oír gritar a Fleur Delacour; sólo busca en el aire si habían rastros de chispas rojas y continúa su camino tratando de no pensar que Fleur había perdido la prueba. Más adelante, Cedric Diggory lanza chispas rojas para que rescaten a Viktor Krum, a diferencia de la versión cinematográfica, donde tanto Harry como Cedric forcejean y corren por la copa, dejando abandonado a Krum a su suerte.